El importante papel de la Formación Profesional en la empleabilidad en España

En la actualidad, el mundo está experimentando cambios vertiginosos en su entorno laboral. Los avances tecnológicos y la globalización están redefiniendo la naturaleza misma de los trabajos, su exigencia, y las competencias requeridas para adentrarse en el mercado laboral. Tanto es así que la Comisión Europea ha señalado que para el año 2030, las empresas necesitarán un 65% de profesionales altamente cualificados, formados en Formación Profesional (FP). Esto nos plantea una pregunta esencial: ¿cómo puede la Formación Profesional impulsar la profesionalización y empleabilidad en España?

Durante los últimos años, hemos sido testigos de una transformación silenciosa, pero poderosa en el ámbito de la Formación Profesional en España. No solo se ha convertido en la principal opción para los estudiantes, superando a la educación universitaria, sino que también se ha consolidado como una elección atractiva y rentable. Y ello tanto para los jóvenes que buscan una entrada rápida y efectiva al mundo laboral, como para los profesionales que aspiran a mejorar sus habilidades y adquirir competencias altamente demandadas por la industria.

Así, se ha consolidado como una de las opciones educativas más atractivas y prometedoras, alcanzando una tasa de empleabilidad del 100% en algunos grados, según el Observatorio de la Formación Profesional.

Su enfoque práctico, su capacidad de adaptación a las necesidades cambiantes del mercado laboral y sus métodos innovadores que facilitan la conciliación hacen de la FP la opción más factible para abordar los desafíos que enfrenta el mercado laboral español. Según los datos más recientes de Eurostat, España se enfrenta a un problema de escasez de talento, lo que se traduce en numerosas vacantes sin cubrir. De hecho, el II Informe Adecco sobre Necesidades del Mercado de Trabajo revela que «tres de cada cuatro empresas afirman tener problemas para encontrar talento».

Indudablemente, España se halla en una encrucijada donde la profesionalización de los empleos emerge como un factor crítico para impulsar la empleabilidad, con una atención especial en los jóvenes, quienes lamentablemente constituyen el segmento más afectado en el contexto europeo. De acuerdo con los datos más recientes proporcionados por la Unión Europea, los menores de 25 años en España enfrentan una tasa de desempleo del 26.8%. Esta cifra, aunque preocupante, no solo refleja la necesidad de brindar oportunidades laborales a esta generación, sino también la imperativa importancia de fortalecer y adecuar la Formación Profesional a las demandas del mercado laboral actual. Es un desafío que debe abordarse con determinación y visión estratégica, reconociendo que la capacitación y profesionalización de los jóvenes no solo garantizan su futuro, sino que también contribuyen al desarrollo sostenible y a la competitividad de la nación en su conjunto.

En este escenario, Universae lidera la vanguardia al presentar una propuesta completamente innovadora y minuciosamente, adaptada a las necesidades del mercado laboral, estudiantes y trabajadores. Para lograrlo, es esencial mantener una conversación constante y fluida entre las instituciones educativas, el sector empresarial y las instituciones públicas. Esto no solo garantizará una empleabilidad destacada, sino que también dará lugar a un gran número de profesionales altamente cualificados y preparados para afrontar los desafíos del mundo laboral actual.

Además, la Institución Superior de Formación Profesional oficial va más allá de la capacitación básica al ofrecer programas de especialización que fomentan la innovación en diversos sectores industriales. Estos programas permiten a los estudiantes adquirir habilidades altamente demandadas que impulsan la competitividad y el desarrollo económico en áreas críticas de la industria. La visión de Universae consiste en contribuir no solo a la formación de profesionales altamente cualificados, sino también a promover la innovación y el crecimiento sostenible en el tejido empresarial de España y más allá.

De esta forma, la Formación Profesional, con una tasa de crecimiento en los últimos años en torno al 6% anual, según un análisis elaborado por un grupo de expertos convocados por el Instituto Coordenadas, se posiciona como un elemento vital para la profesionalización de los sectores industriales rectores de nuestro país. También se consolida como un aliado clave para abordar el desempleo juvenil y las demandas de las empresas, fomentando la entrada de personal cualificado y especializado en aquellas compañías que necesitan dichos perfiles para aumentar su competitividad en el sector.